Las sombras yacen en tu jardin,
ya es demasiado tarde.
Nadie lamenta que no estés acá,
las horas siguen pasando.
¿Acaso creíste que tanto dolor iba a quedar impune?
Es tarde para pedir perdón.
Estás en todas partes,
entre la tierra húmeda.
Ya no tenés que fingir más
¿Sentís el frío?
Sonrio.